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En WINEGG, el bienestar de los futuros residentes ocupa un lugar central. Nuestra estrategia innovadora nos permite crear espacios vitales sostenibles para generaciones.
WINEGG predica con el ejemplo: nuestro compromiso con el desarrollo de proyectos sostenibles se demuestra sobre todo en el hecho de que todos los proyectos residenciales están certificados de forma independiente de acuerdo con los criterios del DGNB i El DGNB - Consejo Alemán de Construcción Sostenible - es una organización que concede certificaciones de sostenibilidad para proyectos de construcción , y aspiramos a la verificación de la taxonomía de la UE.
Como miembro comprometido de VÖPE, nos tomamos muy en serio nuestra responsabilidad socioeconómica y creamos espacios vitales que son algo más que un lugar donde vivir. Gracias a nuestro compromiso constante con la sostenibilidad, contribuimos a aumentar sustancialmente el valor de nuestras propiedades.
El sistema DGNB lleva a cabo una evaluación holística de la sostenibilidad dando la misma importancia a las áreas clave de la ecología, la economía y los aspectos socioculturales. La elección de la ubicación, así como la calidad técnica y de procedimiento, también se incluyen en la evaluación global.
Se evalúa la eficiencia del consumo de energía y las emisiones de CO2, teniendo en cuenta también el uso de energías renovables.
El uso de materiales y recursos de construcción se diseña de forma eficiente para minimizar los residuos y reducir el impacto ambiental.
Se da prioridad a la selección de materiales ecológicos y a las prácticas de construcción respetuosas con el medio ambiente.
Se integran tecnologías para reducir el consumo de agua y aguas residuales con el fin de minimizar la huella ecológica.
Se tienen plenamente en cuenta todos los costes incurridos a lo largo de la vida útil del edificio.
Se aplican sistemáticamente medidas para mantener el valor de los edificios y las infraestructuras.
Se analizan cuidadosamente los riesgos económicos y los efectos económicos a largo plazo de cada medida.
Los edificios y espacios se diseñan de forma que satisfagan diferentes requisitos culturales y funcionales.
En los edificios se garantiza la accesibilidad y facilidad de uso para todas las personas.
Los espacios se desarrollan para fomentar la interacción social y la creación de comunidades.
Los elementos que fomentan la salud y el bienestar son parte integrante de los espacios habitables.
La calidad constructiva y la seguridad de los edificios se garantizan mediante inspecciones periódicas.
Las estructuras de los edificios se diseñan de forma que puedan adaptarse a las necesidades futuras.
El proceso de planificación está diseñado para maximizar la eficiencia y la sostenibilidad.
La atención se centra en el cumplimiento de las normas medioambientales y la minimización de las molestias ocasionadas por la construcción.
La elección del emplazamiento tiene en cuenta las conexiones óptimas de transporte, la proximidad a los servicios y la integración en la infraestructura existente.
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La certificación DGNB para proyectos de construcción residencial apoya el desarrollo sostenible, lo que aporta beneficios de gran alcance para los promotores y operadores de edificios, así como para el medio ambiente y la sociedad. A continuación encontrará un resumen de los beneficios más importantes:
La construcción respetuosa con el medio ambiente y el uso eficiente de los recursos contribuyen en gran medida a minimizar el impacto ambiental.
Gracias a métodos y tecnologías de construcción optimizados, el consumo de energía y los costes de funcionamiento se reducen en los edificios certificados.
La integración de energías renovables se promueve cada vez más a través de la certificación y reduce las emisiones de gases de efecto invernadero.
La consideración de los aspectos sanitarios en el proceso de certificación fomenta un entorno de vida y de trabajo más saludable.
Los proyectos certificados conceden gran importancia a la accesibilidad y facilidad de uso de las instalaciones para todas las personas.
Los edificios certificados se caracterizan por unos costes de funcionamiento más bajos, lo que supone un ahorro económico considerable.
Gracias a una mayor eficiencia y a unos estándares sostenibles, los edificios certificados aumentan su valor de mercado y el rendimiento de la inversión.
Los procesos de certificación ayudan a identificar y minimizar los riesgos medioambientales y sociales, lo que se traduce en inversiones más seguras.
La certificación apoya el desarrollo de espacios comunitarios que fomenten el contacto y la integración social.
Los proyectos certificados contribuyen al bien común apoyando proyectos sociales locales.
Los requisitos de la certificación motivan el uso y desarrollo de tecnologías innovadoras y sostenibles.
El proceso de certificación promueve la difusión y profundización de los conocimientos y prácticas específicos del sector.
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